Perdida en la frustración del momento que se alargaba sin
poder ponerle freno, humillada por las palabras que se negaban a salir de mi
mente en el orden correcto, desesperada por vislumbrar un futuro sin historias
que relatar, un caos que no presagiaba un retorno…
El punto y seguido vuelve a aparecer, no importan los puntos
finales si después eres capaz de empezar de nuevo. Por eso, todo debe seguir
hacia delante, buscar nuevas musas allá donde te lleve la imaginación. Escribir
no es siempre fácil, el escritor siempre tendrá momentos de oscuridad en los
que querrá salir corriendo, momentos en los que se preguntará si realmente ha
escogido el camino correcto pero pese a todo, seguirá dando un paso tras otro,
buscando la forma de mejorar su estilo, ¿por qué? Porque no quiere fallar a
todos esos que le acompañaron en su largo camino, porque no quiere fallarse a
sí mismo.
Así que, sin más esperas, haré de la tinta mi sangre, de las
letras mi voz y con el corazón empuñaré el bolígrafo que escriba sobre la hoja
blanca que nunca más volverá a estar vacía de inspiración, de sentimientos y de
ilusión, porque eso es lo que me piden el alma y la razón.
He vuelto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario